En la tarde noche del miércoles 16 de marzo los hermanos y devotos de Nuestro Padre Jesús del Rescate vivimos una emotiva jornada con el traslado del Titular hasta la Basílica y Real Santuario de Santa María de la Victoria, donde se llevará a cabo el triduo en su honor durante los días 17, 18 y 19 de marzo.
Desde minutos antes del inicio del traslado, numerosas personas esperaban impacientes en calle Agua para volver a encontrarse ante Él. A las 20:00 horas partió desde la casa de hermandad una comitiva formada por la cruz parroquial, más de cincuenta velas portadas por hermanos, el guión, la capilla musical, dalmáticas, monaguillos y el trono de traslado, al cual seguían dos tambores roncos.
Pese a la inestabilidad meteorológica de las horas y los días previos, no fue obstáculo para que se viviera un emotivo traslado, en cuyo recorrido se pudieron ver bellas estampas que quedarán grabadas en la memoria de los rescateros. Entre ellos, cabe destacar el paso del trono por la Capilla de calle Agua; allí esperaba a su Hijo María Santísima de Gracia, como ya hiciera el pasado 30 de octubre al inicio de la procesión magna. Antes de continuar el caminar del cortejo, se rezó un Padre Nuestro y un Ave María ante la Virgen de Gracia.
En las calles Victoria y Amargura se agolpaba una multitud de cofrades que querían presenciar este reencuentro de Jesús del Rescate con su barrio de la Victoria. Al llegar a los jardines de Alfonso XII y con la noche ya caída, se vivieron íntimos y bellos momentos con el paso de nuestro Titular entre la arboleda y por los estrechos senderos de estos jardines victorianos. Los participantes del cortejo alumbraban el camino por el que pocos minutos después pasaría el trono del Cristo del Rescate. El Santuario de la Patrona ya se vislumbraba.
En los jardines de Alfonso XII se vivieron uno de los puntos de mayor lucimiento y dificultad del recorrido. La estrechez de sus puertas de acceso y, especialmente, de salida obligaron a desplegar a los portadores y capataces toda su sabiduría para continuar el recorrido sin ningún imprevisto. Tras ello, Jesús del Rescate ya se encontraba en la Plaza del Santuario. El trono avanzaba lentamente para el deleite de todos los hermanos y devotos que allí se encontraban, quienes pudieron contemplar la bella imagen de nuestro Titular ante el Santuario.
En torno a las 21:00 horas Jesús del Rescate atravesaba el dintel del Santuario ante el silencio y expectación de las personas que allí esperaban. Allí nos recibió el padre Alejandro Escobar, párroco del Santuario, a quien se le cedió el martillo del trono para que diera los toques previos a la entrada del Titular en la Basílica y Real Santuario. Jesús del Rescate ya se encontraba ante la Patrona de Málaga, la Virgen de la Victoria.
